Adultez
La adultez representa la etapa más extensa del ciclo vital humano, iniciándose aproximadamente a los 20 años y extendiéndose hasta el final de la vida.
Se subdivide convencionalmente en tres fases, cada una con características y desafíos evolutivos particulares:
Adultez Temprana (20 a 40 años)
Esta fase se caracteriza por la toma de decisiones cruciales en ámbitos como la formación superior, la inserción y desarrollo laboral, y el establecimiento de relaciones íntimas significativas. Es un periodo de exploración identitaria y consolidación del rol adulto.
La adultez temprana (y la etapa previa denominada adultez emergente, ~18-25 años) marca la transición desde la adolescencia. La salud física generalmente alcanza su cénit para luego iniciar un declive gradual. Psicológicamente, continúa el desarrollo del sentido de identidad (Erikson) y se profundiza en la capacidad para la intimidad versus el aislamiento. Decisiones vitales como la formación de pareja estable, la paternidad/maternidad y la elección de una trayectoria profesional son comunes.
Desarrollo Físico
- La condición física alcanza su máximo rendimiento, seguido de una disminución paulatina.
- Los estilos de vida (dieta, ejercicio, consumo de sustancias) sientan bases para la salud futura.
Desarrollo Cognitivo
- El pensamiento postformal (si se desarrolla) permite una mayor complejidad, relativismo y pragmatismo en el razonamiento y los juicios morales.
- Se toman decisiones educativas y laborales, a menudo tras una fase exploratoria (especialmente en la adultez emergente).
Desarrollo Psicosocial
- Los rasgos de personalidad tienden a estabilizarse, aunque eventos vitales significativos pueden inducir cambios.
- Se establecen relaciones íntimas y compromisos a largo plazo, aunque no siempre de forma definitiva.
- La mayoría de las personas establecen pareja y muchas inician una familia.
Adultez Media (40 a 65 años)
Durante la adultez media, es frecuente una reevaluación de la propia vida, buscando un nuevo sentido o propósito (generatividad vs. estancamiento, según Erikson). Puede emerger una mayor sabiduría práctica. Se evalúan los logros personales y profesionales, y se inicia la preparación para la vejez.
Este periodo se caracteriza por cambios físicos, psicológicos y sociales notables. Puede observarse un deterioro más evidente en la salud física, vigor y fuerza. La menopausia en las mujeres y la andropausia (más gradual) en los hombres son hitos biológicos. Frecuentemente coincide con la independencia de los hijos (síndrome del "nido vacío") y la llamada "generación sándwich", que afronta la doble responsabilidad de cuidar a los hijos adolescentes o jóvenes adultos y a los padres ancianos.
Desarrollo Físico
- Puede iniciarse un deterioro más perceptible de las capacidades sensoriales (vista, oído), salud general, vigor y resistencia.
- Ocurrencia de la menopausia en mujeres.

Pregunta
En relación al desarrollo físico en la adultez tardía:
Desarrollo Cognitivo
- Algunas facultades mentales, como la inteligencia fluida (velocidad de procesamiento, memoria de trabajo), pueden empezar a declinar, mientras que la inteligencia cristalizada (conocimiento acumulado, vocabulario) suele mantenerse o incluso aumentar.
- Se eleva la competencia y capacidad práctica para resolver problemas complejos de la vida real (pensamiento pragmático).
- La producción creativa puede disminuir en cantidad, pero a menudo aumenta en calidad e integración.
- Algunos alcanzan la cúspide profesional y económica; otros pueden experimentar estancamiento, agotamiento (burnout) o reorientación profesional.
Desarrollo Psicosocial
- Continúa el desarrollo de la identidad; puede ocurrir la "crisis de la mediana edad" (aunque su universalidad es debatida), implicando una reevaluación de metas y prioridades.
- La doble responsabilidad (hijos y padres) puede generar estrés significativo.
- La partida de los hijos ("nido vacío") puede ser vivida como una liberación o una pérdida, requiriendo una redefinición de roles.
Adultez Tardía o Vejez (+65 años)
La adultez tardía, o vejez, comienza convencionalmente a los 65 años. Presenta desafíos y oportunidades particulares:
- Mayor prevalencia de enfermedades crónicas y problemas de salud.
- Acumulación de pérdidas significativas (salud, roles sociales, seres queridos).
- Búsqueda de integridad yoica versus desesperación (Erikson), reflexionando sobre la propia vida y su significado.
El proceso de envejecimiento requiere adaptaciones continuas a nivel físico, cognitivo y social.
Esta etapa se caracteriza por una mayor probabilidad de deterioro físico y cognitivo, aunque con gran variabilidad individual. Surge la necesidad de afrontar pérdidas en múltiples dominios. La jubilación ofrece más tiempo libre, pero a menudo implica una reducción de ingresos y la necesidad de redefinir la identidad fuera del rol laboral. La proximidad de la muerte impulsa la búsqueda de significado vital y trascendencia.
Desarrollo Físico
- Aunque muchas personas mayores son activas, en general disminuyen la salud y las capacidades físicas (fuerza, resistencia, equilibrio).
- El enlentecimiento del tiempo de reacción afecta diversas áreas del funcionamiento cotidiano (p. ej., conducción).
Desarrollo Cognitivo
- La mayoría de las personas mayores mantienen la alerta mental.
- Aunque ciertas áreas de la inteligencia (especialmente la fluida) y la memoria pueden declinar, existen estrategias compensatorias y la sabiduría puede aumentar.
- El riesgo de demencias (como el Alzheimer) aumenta con la edad, pero no es una consecuencia inevitable del envejecimiento.
Desarrollo Psicosocial
- La jubilación (si ocurre) requiere una adaptación y abre nuevas posibilidades para el uso del tiempo.
- Se desarrollan estrategias más flexibles para afrontar las pérdidas personales y la perspectiva de la propia muerte.
- Las relaciones sociales significativas (familia, amigos) son un soporte crucial para el bienestar.
- La búsqueda de significado vital y la revisión de la propia vida (life review) asumen una importancia central.
Sub-etapas de la Vejez
La vejez no es homogénea. Se suelen distinguir subetapas, aunque las edades exactas pueden variar según los autores:
- Vejez temprana o "jóvenes-viejos" (65-74/79 años): Generalmente activos, relativamente saludables y socialmente involucrados.
- Vejez media o "viejos-viejos" (75/80-84/89 años): Aumentan las fragilidades, las enfermedades crónicas y la necesidad de apoyo.
- Vejez avanzada o "muy viejos" (>85/90 años): Mayor probabilidad de dependencia, comorbilidad y deterioro funcional significativo. La longevidad depende de factores genéticos, estilo de vida y acceso a cuidados.

Pregunta
Según la clasificación habitual, ¿a partir de qué edad se considera a una persona como parte del grupo de "muy viejos" o "ancianos"?